Preocupan los empleos en el comercio: "Hay 500 puestos de trabajo que tambalean"

El Sindicato de Empleados de Comercio de Esquel dirigió una nota al intendente, Sergio Ongarato, para solicitar que sean posibles mayores medidas de flexibilidad en las restricciones de circulación y apertura de locales comerciales en la ciudad. 

"Estamos viendo con mucha preocupación la cuarentena. Creemos que ya es tiempo de que se flexibilice el comercio en general con los recaudos que dicta el sentido común y aplicando un protocolo que permita cuidarse y cuidar a los demás", remarcó el secretario general del SEC, Miguel Álvarez. En este sentido, consideró que con la experiencia del hantavirus ya hay en nuestra región cierto conocimiento al respecto de cómo cuidarse.

Asimismo, analizó algunas medidas como excesivas: "Hemos sido conejillos de indias con el tema de los controles en la calle, cierre del centro y cosas por el estilo. Hoy por hoy me da la impresión de que estamos con un atisbo de autoritarismo bastante grande". "Todos sabemos lo que tenemos que hacer y creemos que la presencia policial debe ser la mínima imprescindible en la calle, intervenir cuando vean que hay gente que está haciendo las cosas mal. Que te estén parando a cada rato me parece un disparate", agregó.

Contextualizó que este problema se agrava por el brote de hantavirus del año pasado y la crisis provincial que trae consigo el retraso en el pago de haberes a empleados públicos. "Entendemos que hay un mañana y este mañana implica que tiene que haber gente que pueda estar trabajando", enfatizó el dirigente sindical. 

"Nosotros hemos soportado muchas crisis y las crisis de la cordillera son distintas a las de la costa: Comodoro tiene petróleo, Trelew y Rawson están ahí y Madryn tiene sus propios ingresos. Esta crisis significa muchísimo para nosotros", explicó. "Habrá que hacer buenos controles de quién entra y quién sale pero adentro la actividad tiene que parecerse a una actividad normal", sostuvo el secretario general del Sindicato de Empleados de Comercio.

Detalló que "tambalean" alrededor de 500 puestos de trabajo. "¿Quién va a hacerse cargo?", se preguntó. "Nosotros como gremio podremos llegar con alguna ayuda, o el municipio, pero es mucha gente. Sería, salvando las distancias, tan serio como que aparecieran casos y se abarrotara el hospital", graficó. "Desarrollo Social no daría abasto si esto llegara a pasar", evaluó.

"Tiene que haber un pequeño relajamiento de estas medidas de seguridad", insistió. "Que la actividad sea lo más cercana posible a la normal, que se vea cómo puede funcionar cada comercio pero apuntando a reactivar la economía, porque el panorama hacia adelante es muy grave", prosiguió Álvarez, al tiempo que manifestó su apoyo a Ongarato pero pidió separarse de las restricciones provinciales.

"Le damos todo nuestro apoyo al intendente en función de que se tomen decisiones, el pueblo lo eligió a él y creo que lo está haciendo bien pero en esto necesitamos desprendernos un poco de las decisiones que toma la provincia. Necesitamos reactivar la economía local porque sino el panorama es muy serio y muy duro. Va a haber mucha gente en la calle dando vuelta sin trabajo y necesitando comer".

 

La palabra de Miguel Álvarez: