¿El PJ de Chubut cierra las puertas a las alianzas electorales?

La convocatoria al Congreso Provincial del Partido Justicialista para el próximo sábado 18 de febrero, abrió una serie de interrogantes acerca de la posibilidad de que esa fuerza política conforme algún frente o alianza en el primer turno electoral que habrá en Chubut, que será la elección a intendente de Trelew el 16 de abril.

Los cronogramas y los plazos juegan decididamente en contra de esa posibilidad. El 15 de febrero vence el plazo para la presentación de alianzas y frentes en Trelew, y las autoridades del PJ convocaron a su congreso, que debe dar mandato para realizar esos acuerdos, tres días después de esa fecha límite.

En principio de esta manera quedaría trunca la posibilidad de que en Trelew se aglutinen en un mismo frente el PJ, Chubut Somos Todos y el Frente Renovador. Aunque algunos estudiosos de los laberintos peronistas aseguraron que el Consejo Provincial del partido podría sellar acuerdos “ad referéndum” del máximo órgano partidario.

Uno de los posibles precandidatos del PJ, el ex intendente César Gustavo Mac Karthy, reconoció en las últimas horas que estudia con detenimiento la alternativa de ser candidato a través de otra fuerza política. Y justamente fundamentó ello en la convocatoria tardía que realizaron las autoridades justicialistas.

La pregunta que quedó flotando en el ambiente político es si, el esquema planteado en Trelew (sin alianzas, en principio) se replicará o no en el armado provincial de cara a las elecciones, para las que el gobernador del Chubut, Mariano Arcioni, aún no fijó fecha.

Ya se sabe que no serán en abril, porque no dan los plazos. Los dos precandidatos lanzados desde el oficialismo y el para oficialismo, el intendente de Comodoro Rivadavia, Juan Pablo Luque, y el vicegobernador Ricardo Sastre, prefieren que el comicio sea en mayo o junio.

Arcioni ya avisó que para él las elecciones serán en conjunto con las nacionales, en octubre próximo. Salvo que existan consensos políticos mayoritarios que hagan variar la fecha.

Los tiempos políticos los maneja Arcioni

El gobernador Mariano Arcioni está disfrutando de su último año de gestión, con un horizonte promisorio, y maneja los tiempos electorales, como si fuera un volante central clásico de un equipo de fútbol que va ganando por la mínima diferencia cuando restan cinco minutos para que finalice el juego.

En reiteradas oportunidades, el mandatario chubutense pidió paciencia a los por ahora precandidatos y les recomendó calmar su ansiedad, puesta en jaque por la definición de la fecha en la que se realizarán las elecciones provinciales en nuestra provincia.

Hay que decir que los mayores niveles de ansiedad se apoderaron en las últimas semanas de Luque y Sastre, quienes insistente y cotidianamente se refieren a la fecha de convocatoria de las elecciones, apuntando al adelantamiento y desdoblamiento respecto de las elecciones nacionales.

No una, sino varias veces el gobernador Arcioni dijo que según su opinión se debería votar en Chubut en octubre, de manera conjunta con las elecciones en las que se elegirá al próximo Presidente de la Nación.

Y no es casualidad que Arcioni espere que sea esa la fecha de votación. Su decisión, por ahora no comunicada, está basada en la posibilidad de que el actual ministro de Economía, Sergio Massa, su principal referente político, sea candidato a suceder al presidente Alberto Fernández.

Se suma además que tanto él como Massa vienen subiendo su imagen positiva según las últimas encuestas realizadas por CB Consultora Opinión Pública. De hecho el ministro de Economía es el dirigente político nacional con mejor consideración entre los chubutenses encuestados.

Luque y Sastre apelaron a todas las maneras posibles para intentar que Arcioni adelante y desdoble las elecciones. Lo hicieron en privado y también a través de los medios periodísticos, ponderando las ventajas que tendría para los chubutenses votar en mayo o junio. Aunque también mencionaron noviembre, luego de las elecciones nacionales.

El tema de la fecha de la convocatoria por momentos monopolizó la agenda de estos dirigentes, y quizás es hora de que opten por esperar con tranquilidad el momento que Arcioni decida hacer la convocatoria a elecciones provinciales.

En esa materia parecen haber tomado nota los otros demás precandidatos, los de Juntos por el Cambio. Damián Biss e Ignacio Torres no entraron en ese juego de debate público de las fechas, quizás porque en la alianza opositora tienen otros problemas que resolver primero.

Juntos pero no tanto

La cuestión política de Trelew, donde se vota el 16 de abril, y donde probablemente no habrá internas abiertas entre los precandidatos del radicalismo, Federico Massoni (apoyado por la mayoría del partido) y Gerardo Merino, que es radical pero será candidato del PRO.

Como se resuelva la interna en Trelew podrá repercutir, o no, en el armado provincial de Juntos por el Cambio. Es cierto que nadie quiere romper la alianza, pero será difícil constituirla si no hay internas abiertas entre el radicalismo (Biss) y el PRO (Nacho Torres).

Mientras los principales aspirantes a sucederlo, se dedican casi exclusivamente a hablar todo el tiempo de política y a rosquear, el gobernador Arcioni maneja los tiempos electorales, a la vez que se dedica todo el día a la gestión de gobierno, con recorridas por el interior, inauguraciones y anuncios de obras.

Lo que parece una falta de definición del mandatario provincial no es otra cosa que marcar los tiempos electorales de la política. Las razones hay que buscarlas en la necesidad de impulsar fuertemente la gestión de gobierno en su último año de mandato y también en su convencimiento de que Massa podrá enderezar el rumbo de la macro economía argentina y ser el candidato a presidente del Frente de Todos.