La Justicia Federal retrotrajo la autorización que había otorgado para trasladar a Facundo Jones Huala, líder de la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), desde la cárcel de Rawson a la de Esquel. El juez Gustavo Zapata había autorizado el cambio para acercarlo a Bariloche, donde reside su familia, y había ordenado gestionar de forma urgente su cupo en la unidad U14, de seguridad media.
Sin embargo, el Ministerio de Seguridad de la Nación se opuso al traslado, argumentando que la cárcel de Esquel no cuenta con las medidas de seguridad necesarias para alojar a Jones Huala, considerado un detenido “peligroso”. A partir de esta postura, el juez cambió de decisión y negó el traslado, priorizando la opinión del Consejo Correccional, encargado de evaluar la conducta de los internos.
Tras la resolución, Jones Huala retomó su huelga de hambre líquida, que mantiene de manera indefinida, y su defensa aseguró que continuará hasta obtener la autorización para ser trasladado. El líder de la RAM está detenido preventivamente desde junio, acusado de supuesta asociación ilícita calificada, luego de justificar métodos violentos para defender la causa mapuche durante la presentación de su libro "Entre Rejas: Antipoesía incendiaria". La Justicia, por ahora, mantendrá su detención hasta el 6 de diciembre, aunque la preventiva podría extenderse hasta dos años debido a la calificación del delito como complejo.
El director del Régimen Correccional de la Nación, Gabriel Aquino, oficializó el rechazo del Ministerio de Seguridad, recordando los antecedentes del detenido, incluyendo su condena en Chile por el incendio de una propiedad y la portación de un arma casera. Destacó que Jones Huala es líder de la RAM, no tiene domicilio fijo y se mueve entre distintas ciudades de la Patagonia. Además, señaló que Rawson es un establecimiento de máxima seguridad, mientras que Esquel, de seguridad media, no reúne las condiciones necesarias.
La defensa, a cargo de la Gremial de Abogados y Abogadas de la República Argentina, cuestionó la decisión judicial y denunció que el rechazo ignora la Constitución y tratados internacionales, privilegiando un reglamento administrativo. Insistieron en que el traslado permitiría acercar al detenido a su familia y criticaron que el Consejo Correccional demorará su dictamen, anticipando que su opinión será adversa, considerando a Jones Huala “terrorista y peligroso”.
R.G.